El principal hallazgo de un estudio encabezado por la Universidad de Cornell, revela que el ácido acetilsalicílico es capaz de detener la muerte celular que ocurre en varias enfermedades neurodegenerativas.
Un estudio realizado por la Universidad de Cornell revela que el ácido acetilsalicílico, más comúnmente conocido como aspirina, es capaz de detener la muerte celular que ocurre en varias enfermedades neurodegenerativas.
La aspirina surgió como analgésico o antiinflamatorio, pero poco a poco se fueron descubriendo otras propiedades, como por ejemplo, su capacidad para prevenir infartos o ictus, funciones a las que ahora se les ha sumado la prevención tanto del Alzheimer como el Parkinson.La enzima GAPDH (Gliceraldehído-3-fosfato deshidrogenasa) cumple un papel determinante en el metabolismo de la glucosa, además de participar en varios mecanismos celulares. También tiene participación en el desarrollo de enfermedades como el Alzheimer, el Parkinson y otras enfermedades neurodegenerativas: (Huntington, Esclerosis lateral amiotrofica o ELA, Cuerpos de Lewy, Ataxia de Friedreich).
Tras una serie de experimentos, los investigadores descubrieron que cuando la neurona del estrés cerebral se mueve, el núcleo de la enzima GAPDH incrementaba su volumen de proteína lo que decanta en la muerte celular. Por lo tanto, al aplicarles el ácido acetilsalicílico se impedía que este proceso ocurriera.Aunque aun se necesitan más investigaciones al respecto, los especialistas ya se muestran esperanzados con la idea de emplear ácido acetilsalicílico para desarrollar tratamientos que permitan luchar contra enfermedades como el Parkinson y el Alzheimer.
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